Psicología para adolescentes

Los trastornos de la conducta alimentaria afectan a un mayor porcentaje de población juvenil ya que la adolescencia es una etapa en la que los cambios físicos, la presión social y en ocasiones la falta de autoestima, crean el caldo de cultivo perfecto para estas problemáticas. Bulimia nerviosa, anorexia nerviosa, trastornos de evitación y atracones son los más comunes. 

La ayuda es clave para ir a la raíz de las causas y dar solución a los trastornos alimentarios. La actuación temprana contribuye a su solución minimizando la afectación a su salud física y mental y a su desarrollo físico y emocional.

La terapia psicológica para adolescentes rebeldes ayuda a tratar problemáticas de violencia filio-parental, violencia entre hermanos, robos, agresiones… 

La ayuda de un psicólogo para adolescentes permite identificar las causas y dar soluciones a través del tratamiento de terapia cognitivo conductual personalizado para cada joven. 

Crear un clima de confianza entre el psicólogo y el joven es esencial para que se abra y exprese en libertad, llegando al fondo de sus sentimientos y logrando un cambio real que le ayude a alcanzar la madurez y dejar en el pasado estos problemas.

Conflictos, dificultad para acatar las normas, dificultad para llegar a acuerdos, aislamiento… La terapia de psicología para adolescentes aborda estos problemas. 

El asesoramiento para padres y madres y la terapia con un psicólogo juvenil permiten dar solución a problemas en el ambiente familiar que afectan a la salud mental de todos los miembros de la familia, y restaurar así la armonía familiar.

La ayuda psicológica para adolescentes proporciona recursos, herramientas y técnicas a los jóvenes para mejorar en sus relaciones personales, ganar en autoconocimiento, y avanzar hacia la adultez cuidando su salud psicológica y emocional. 

Las terapias de apoyo a adolescentes ayudan a superar problemas de autoestima, dificultades para hacer y mantener amistades, estrés, impulsividad, depresión, ansiedad, conducta autolesivas, dificultades para decir no…

En Con Psicología encontrarás psicólogos especialistas en adolescentes y te ayudaremos a superar estos problemas a través del tratamiento de terapia psicológica personalizado que necesita cada joven.

Los cambios psicológicos pueden alertar del consumo, abuso y adicción de sustancias estupefacientes en la adolescencia. En muchos casos el origen no está solo en la presión social sino también en problemas emocionales o en la dificultad para relacionarse. 

Tratar el abuso de sustancias como el alcohol, los porros u otras drogas con ayuda de psicólogos expertos permite encontrar el origen del problema. Y proporciona al joven herramientas, recursos y técnicas para su recuperación así como para evitar caer en adicciones a lo largo de toda su futura vida adulta.

Adicción a los videojuegos, adicción al móvil, adicción a las redes sociales, adicción al juego o las apuestas…

En muchos casos, problemas psicológicos sin resolver son el origen de las adicciones conductuales en adolescentes, que encuentran en ellas el refugio ansiado y la satisfacción inmediata que no encuentran en otras actividades o parcelas de su vida.

tratamiento a medida es clave para adoptar las medidas precisas y dotar al adolescente de los recursos necesarios para superar su adicción y recuperar la salud mental mejorando el control de su vida en el camino hacia la madurez.

En caso de bajo rendimiento escolar, el apoyo por parte de psicólogos especializados ayuda a superar las dificultades de aprendizaje y los obstáculos que están afectando. 

Como psicólogos para adolescentes en Ourense ayudamos a los jóvenes a solucionar y superar otras problemáticas en la adolescencia: conflictos con la autoridad escolar, absentismo escolar...

El bullying o acoso escolar, constituye uno de los problemas más estresantes a los que se enfrentan los adolescentes, y también de los que más secuelas dejan.

Quien sufre este problema presenta una serie de síntomas que afecta a todas las esferas de su vida tanto académicamente como a nivel afectivo, emocional, social y familiar.

Detectar el acoso escolar en el ámbito educativo puede resultar complejo, ya que puede pasar totalmente inadvertido. En muchas ocasiones se produce en forma de gesto de amenaza tan simple como un dedo en la boca que indica silencio o una señal verbal de agresión que dura escasos segundos y complica que sea percibido por los demás.

Síntomas del acoso escolar

Entre los síntomas que pueden indicar que nuestro hijo está sufriendo bullying o acoso escolar, se encuentran:

Elevado estrés social: problemas para establecer relaciones con los compañeros, evitar salir, negarse a realizar o abandonar bruscamente actividades, pérdida de amistades escolares, resistencia a ir al colegio o al instituto.

Ansiedad: inquietud generalizada, miedo, nerviosismo, sentimientos de impotencia.

Depresión: cambios bruscos en el humor, tristeza, llanto, irritabilidad, ideación autolítica o ideas de suicidio.

Problemas de autoestima y falta de confianza en sí mismo.

Somatizaciones: dolores de cabeza, estómago, vómitos.

Afectación del rendimiento escolar.

Síntomas físicos como heridas, rasguños, golpes en los que verbaliza caídas o accidentes frecuentes.